Visitas de este tipo facilitan la inmersión en el entorno sociocultural y crear un espacio de convivencia distendido y diferente al habitual, propicio para la interacción y el fortalecimiento de la red de las mujeres participantes
En el marco de nuestras iniciativas para promover el desarrollo comunitario, y en el marco de Epíclera, nuestro programa para la prevención, detección y orientación de la violencias basadas en el género contra las mujeres migrantes, se llevó a cabo una excursión al Museo Etnográfico de Don Benito. El propósito principal de esta actividad fue doble: por un lado, ofrecer a los participantes una inmersión en el entorno sociocultural de nuestra comunidad, facilitando el conocimiento y la comprensión de sus raíces y tradiciones; por otro, crear un espacio de convivencia distendido y diferente al habitual, propicio para la interacción y el fortalecimiento de la red entre las asistentes.
La visita al museo se diseñó cuidadosamente para ir más allá de una simple observación. Se buscó estimular el diálogo y la reflexión en torno a las piezas expuestas, que son testimonio de la vida cotidiana, las costumbres y la historia de nuestra localidad. Este acercamiento al patrimonio etnográfico no solo enriqueció culturalmente a las visitantes, sino que también sirvió como punto de partida para conversaciones informales y el intercambio de experiencias entre ellas.
La dinámica de la actividad permitió que las participantes interactuaran en un ambiente relajado y compartido, fomentando lazos más allá de sus círculos habituales. El objetivo de generar contactos para la creación de redes de apoyo se vio facilitado por esta atmósfera colaborativa y por las oportunidades de interacción que surgieron espontáneamente durante el recorrido y las actividades complementarias. Estamos convencidas de que este tipo de iniciativas son fundamentales para fortalecer el tejido social y ofrecer herramientas para el apoyo mutuo entre las mujeres migrantes que forman parte de este programa.
El Museo Etnográfico de Don Benito
El Museo Etnográfico de Don Benito es una institución cultural dedicada a preservar y difundir el patrimonio histórico y las costumbres tradicionales de la localidad y su comarca, en la provincia de Badajoz, Extremadura. Se encuentra ubicado en un edificio emblemático: la Casa del Conde, una antigua casa-palacio construida a principios del siglo XX (concretamente en 1905) por encargo del segundo Conde de Campos de Orellana, Don Pedro Granda Calderón de Robles. Esta magnífica edificación, catalogada como protegida, fue adquirida por el Ayuntamiento en 1999 y el museo abrió sus puertas en su ubicación actual el 10 de febrero de 2000. En 2018, el museo fue nombrado en honor a Agustín Aparicio Cerrato, un importante impulsor del mismo.
El museo cuenta con más de 40 salas de exposición, distribuidas en dos plantas y un pequeño sótano, que albergan una vasta colección de objetos de los siglos XIX y XX. Estas piezas ilustran los usos y costumbres de Don Benito en diferentes ámbitos de la vida cotidiana y profesional. Entre las recreaciones y colecciones destacadas se pueden encontrar recreaciones de oficios antiguos (farmacias, escuelas, barberías, imprentas, sastrerías, tiendas de comestibles, etc.) o artículos de la vida doméstica y rural: dormitorios rurales, herramientas agrícolas, instrumentos musicales, trajes típicos, objetos de cerámica.
El edificio en sí mismo es una joya arquitectónica, con una superficie de 2.200 m² que se articula en torno a un Patio Noble, destacando su cúpula central construida en 1928 por los hermanos Maumejean. También cuenta con espacios anexos para exposiciones temporales y actividades culturales.
¿Qué es EPÍCLERA?
EPÍCLERA. Programa para la prevención, detección y orientación de las violencias basadas en el género contra las mujeres migrantes, financiada por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones; Secretaría de Estado de Migraciones; Dirección General de Gestión Migratoria y el Fondo Social Europeo+.
